Sexto día de misión en Belmonte
Viernes, 16 de noviembre.
Texto: Claudia Isabel Cerrate Vargas/ Fotografías: María Fernanda Granados
El sexto día de las misiones, lo comenzamos con el rezo de laudes, como hemos venido haciendo durante la semana. Luego las reliquias de San Julián fueron llevadas hasta la residencia de ancianos “La Mayor”.
A la cinco de la tarde empezamos con la catequesis de los jóvenes, dirigida por el diacono Fernando Fernández. La reunión se basaba principalmente en la autenticidad con la que hay que vivir la fe y la coherencia de vida. Al terminar la reunión, dimos la bienvenida a los jóvenes misioneros, recién llegados de Cuenca.
A las seis y media, dimos paso a la Santa Misa en honor a San Juan del Castillo. En la homilía nuestro diácono se dirigió a los jóvenes, animándonos a imitar la vida de Jesús, alimentándonos con la palabra de Dios y la Eucaristía, que da la vida eterna.
Al terminar, empezamos el Vía Crucis Penitencial en el que nuestras veneradas imágenes de la Virgen Dolorosa, Jesús Nazareno y el Santo Cristo de los peligros recorrieron las calles. Acudió bastante gente al acto, que estuvo impregnado de devoción y recogimiento. Cuando concluyó, diez sacerdotes del Arciprestazgo de Belmonte se pusieron a confesar.
Así fue como pusimos fin a los actos del día.