PRESENTADO EL AÑO DE LA FE EN LA DIÓCESIS DE CUENCA

Dará comienzo mañana jueves, 11 de octubre a las 18:00 horas en una Solemne Ceremonia de Apertura en la Catedral presidida por el Obispo de Cuenca y se prolongará hasta el 24 de noviembre de 2013.

Cuenca, 10 de octubre  de 2012. El Obispo de Cuenca, Monseñor José María Yanguas, junto con el Vicario General de la Diócesis y el Secretario de la Comisión Diocesana del Año de la Fe, han presentado esta mañana a los medios de comunicación el Año de la Fe convocado por el Papa Benedicto XVI y que se celebrará desde mañana, 11 de octubre, hasta el 24 de noviembre de 2013 en la Iglesia universal. En concreto, mañana jueves,  11 de octubre,  el Año se abrirá con una Solemne Ceremonia en la Catedral de la capital conquense a las 18:00 horas y abierta a toda la diócesis, en la que uno de sus actos más significativos consistirá en la entrega del Credo a los asistentes. En las parroquias de toda la diócesis el Año se abrirá el próximo domingo, 14 de octubre en el horario de misas habitual.

El Secretario de la Comisión, Gonzalo Marín, ha presentado el Cartel diocesano que se ha diseñado para esta ocasión en el que aparecen las fechas de inicio y clausura, el logotipo oficial del Año de la Fe y la imagen que lo protagoniza, un altorrelieve del altar del Transparente de la Catedral de Cuenca en la que aparece el Bautismo de San Julián. Asimismo, ha presentado las acciones concretas que se llevarán a cabo a lo largo de todo este tiempo. En cuanto a formación: se tendrán encuentros formativos con el clero de la diócesis, religiosos y seglares haciendo especial énfasis en el Catecismo de la Iglesia Católica, en el credo, en la catequesis de adultos en las parroquias y destacó también la organización de unas jornadas especiales de formación ‘Cristianos y vida pública’ que serán tenidas en el mes de febrero. Explicó también Marín, que el Año de la Fe también incidirá en la caridad con los más pobres y necesitados, y se tratarán de fomentar y ampliar las Cáritas parroquiales y hacer frente a un proyecto solidario diocesano que aún está concretándose.

Por su parte, el Vicario General de la Diócesis, Antonio Fernández, presentó la acción evangelizadora que se llevará a cabo a lo largo y ancho de la geografía conquense por medio de misiones populares que se tendrán en períodos de una semana, en unos casos, o cuatro días, en otros, en más de 42 poblaciones a lo largo de año, comenzando el próximo 12 de noviembre en Belmonte, para después continuar en Minglanilla, Tarancón, Mota del Cuervo, etc.  Serán 45 los seglares voluntarios que las llevarán a cabo y que han venido preparándose para ello a lo largo del verano. Presentó asimismo Fernández, que una urna que contiene las reliquias de san Julián, el segundo Obispo de Cuenca, será la que, en una peregrinación por toda la diócesis conquense, abra la misión evangelizadora en cada población con su presencia. Y destacó que en la Ciudad de Cuenca la misión evangelizadora se llevará a cabo la semana anterior al Domingo de Ramos para concluir con un gran Vía Crucis en la ciudad el día 23 de marzo de 2013 con la presencia de 14 imágenes sagradas, una por cada estación, representativas de las Semanas Santas de la provincia que para esta ocasión serán reunidas en Cuenca de entre catorce municipios conquenses.

Por último, el Obispo de Cuenca, Monseñor José María Yanguas, explicó los contenidos de la Carta Pastoral que con motivo del Año de la Fe, convocado por el Papa Benedicto XVI, ha escrito a los fieles de la diócesis conquense. Se trata, ha explicado, de redescubrir la fe en todos los aspectos a lo largo de este año, en estos especiales momentos que nos toca vivir. Ha resaltado que la Iglesia se encuentra celebrando los cincuenta años del inicio del Concilio Vaticano II y los  veinte años de la publicación del Catecismo de la Iglesia Católica, y que ahora con la celebración de este año la diócesis conquense quiere seguir anunciando el Evangelio para que muchos puedan llegar a la conversión, a la fe. Destacó que la fe se expresa en obras, fruto de la fe, y que necesita plasmarse en la vida concreta de los creyentes. Y destacó, por último, que este año será una magnífica ocasión para revivir el entusiasmo, el gozo de la fe y transmitirla, porque la fe es misionera.